voluntariado_amigos

Experiencia de Voluntariado

Nos encanta vivir nuevas experiencias. Eso es un hecho. Poder vivir nuevas experiencias es para nosotros tan vital e indispensable como el aire que respiramos. Nos llena de felicidad, alegría, gratitud y nos hace sentir vivos. De hecho, precisamente por esto es que decidimos comenzar con este bello estilo de vida nómada. Además, entre más diferente y radical sea la experiencia, mejor. 

Así que obviamente no podíamos dejar pasar la oportunidad de realizar un voluntariado. Pero para empezar, ¿qué es un voluntariado?, bueno básicamente es un intercambio de servicios. Tu ofreces tus habilidades y tu trabajo a cambio de hospedaje gratis. En algunos casos incluso pueden darte algunos beneficios adicionales como por ejemplo el desayuno, comida y/o cena, un pequeño sueldo, la posibilidad de utilizar un coche, acceso gratuito a tours y/o lugares turísticos, etc. La verdad es que depende mucho del tipo de lugar y del tipo de trabajo que vayas a desempeñar. 

Puedes trabajar casi de cualquier cosa como por ejemplo en temas de marketing, de manejo de redes sociales, edición de videos, blogging, de recepcionista, de niñero, de administrador y asistente, de cocinero, de limpieza y mantenimiento, de diseñador, de programador de páginas web o prácticamente de cualquier cosa que se te ocurra. De igual forma, los lugares disponibles para desempeñar tu trabajo son muy variados. Puede haber desde hoteles hasta restaurantes o incluso para trabajar en la casa de particulares. La verdad es que las opciones y combinaciones para los voluntariados son infinitas.        

Yo en lo particular llevaba ya muchos años pensando en hacer uno (desde cuando era un Godinez esclavo del sistema) e incluso recuerdo que hasta ya había pagado la suscripción anual de una página para conseguir voluntariados, ya había contactado a varias de las personas que se anunciaban allí de diferentes partes del mundo e incluso algunos ya hasta me habían aceptado. Como sabrán, yo soy muy bueno con las computadoras y programando sitios web, así que recuerdo que mandé solicitudes a prácticamente cualquier persona que estuviera pidiendo ayuda relacionada con esos temas.   

Mandé solicitudes a personas de China, de Mongolia, de Nepal, de la India y de muchos otros países, la verdad es que mi único filtro era que fuera algún trabajo relacionado con las computadoras. Estaba desesperado. Quería escapar. Lo único que me interesaba en aquel momento era encontrar una manera de romper esa esclavitud en la que estaba sumergido siendo Godinez en mi trabajo rutinario, monótono y aburrido de 9am a 6pm. Tampoco tenía dinero suficiente ni ahorros así que el tema del voluntariado sonaba prometedor. 

Y es que para hacerlo realidad no necesitaba mucho dinero. El gasto más grande era comprar el boleto de avión. Una vez llegando al lugar, el hospedaje y las comidas serían gratis así que podría sobrevivir. Recuerdo muy bien que las personas de Mongolia y de China me contestaron. Ambos tenían un hotel y necesitaban ayuda con el sitio web. Como mencioné antes, ofrecían a cambio de mi trabajo el hospedaje y las 3 comidas del día. Duré semanas enteras pensándolo. Dándole vueltas y vueltas al asunto. Revisando cuánto me costaría un boleto de avión a Mongolia saliendo desde Monterrey, México y comparándolo con el boleto de avión a China. 

Recuerdo que ambos lugares tenían excelentes comentarios de personas que ya habían trabajado allí como voluntarios en meses anteriores, las personas inspiraban mucha confianza, el trabajo que iba a realizar no me costaría tanto esfuerzo, tendría mucho tiempo libre para salir a conocer los alrededores, ambos hoteles se veían hermosos y los anuncios contaban con bastantes fotografías de todo el lugar. Recuerdo que hasta utilicé Google Maps para revisar y confirmar cómo era la zona donde se encontraban ubicados y la verdad es que todo era hermoso. En fin, las dos opciones parecían perfectas y ya solo me faltaba dar un pequeño paso. 

Lo lamentable de este asunto es que al final nada se pudo concretar. Pasó el tiempo, nunca respondí los mensajes de los anfitriones, nunca compré el vuelo a Mongolia ni a China, se me venció la suscripción anual de la plataforma y nunca hice nada. Me ganó el miedo a renunciar a mi empleo y a ese misero sueldo que solo me servía para pagar deudas. Y la verdad es que sí me arrepiento mucho de no haberlo intentado. Estoy seguro que hubiera sido una muy bonita y loca experiencia. Tal cual como me gustan. 

La verdad es que sí debí haberme lanzado. Sí debí haber hecho las maletas. Sí debí comprar esos boletos de avión y sí debí haber contestado esos mensajes de los anfitriones. Pero bueno, en ese entonces no tenía la mentalidad que tengo ahora. En ese momento yo tenía muchas inseguridades y dudaba demasiado de mi propio conocimiento y de mis propias habilidades. En lugar de vivir esa gran aventura que tenía frente a mis ojos decidí quedarme en el mismo lugar que odiaba con todo mi ser. En el mismo trabajo monótono y aburrido que me estaba matando lentamente por dentro. 

Esto que les estoy contando fue muchísimo antes de conocer a mi pareja actual y obviamente mucho antes también de convertirme en Nómada Digital, más o menos por el año 2014. Después de esa experiencia fallida pasaron algunos años hasta que volví a intentar hacer un voluntariado pero lo bonito de esto es que jamás se me quitaron las ganas de vivirlo. Me quedó la curiosidad, me quedó esa “espinita” como decimos en México. Así que bueno, obviamente no podía permitir quedarme con esas ganas durante toda la vida. 

7 años después, en el año 2021 por fin se pudo hacer realidad y lo hice junto a mi pareja que tampoco había hecho ningún voluntariado antes hasta ese momento. Trabajamos durante 1 mes en dos hostales diferentes en la ciudad colonial de Cuenca, Ecuador. Ambos hostales eran administrados por los mismos dueños así que básicamente nos turnábamos y un día nos tocaba trabajar en uno y al día siguiente en el otro. No hicimos ningún trabajo relacionado con nuestros perfiles de desarrollo web pero aún así fue muy enriquecedor y no me arrepiento de nada.

Conocimos mucha gente muy interesante en ambos hostales. Conocimos viajeros, mochileros, otros Nómadas Digitales y, por supuesto, otros voluntarios. Algunos solo estaban de paso, algunos ya llevaban meses trabajando allí y otros tenían incluso ya varios años. A nosotros básicamente nos tocó trabajar en la recepción durante 4 horas al día así que fue realmente sencillo. Teníamos mucho tiempo libre para conocer la ciudad y también mucha facilidad para trabajar con nuestros otros clientes de desarrollo web (mientras atendíamos la recepción del hostal estábamos en la laptop, es decir, combinábamos ambos trabajos muy fácilmente).

A cambio de trabajar en la recepción por 4 horas al día nos daban el hospedaje gratis allí mismo en una recámara del hostal que se compartía con los demás voluntarios. La verdad es que todo funcionó de manera perfecta y obviamente ese mes ahorramos una cantidad bastante considerable de dinero lo cual también se agradece. Y hablando precisamente del dinero, muchas personas lo consideran como el obstáculo más grande a la hora de viajar o a la hora de llevar este estilo de vida nómada así que, si tú eres una de esas personas, aquí tienes otra alternativa más que te puede ayudar bastante a cumplir este sueño sin que eso implique que tengas que gastar una cantidad muy grande de dinero. Es posible solo hay que buscar y créeme que encontrarás uno que se ajuste a tus necesidades y deseos.   

Existen varias plataformas para buscar voluntariados alrededor del mundo y que llevan muchos años funcionando y son bastante confiables. Algunos ejemplos son https://www.workaway.info/, https://www.volunteerworld.com/es, https://aiesec.org/, https://www.goabroad.com/volunteer-abroad, https://www.givevolunteers.org/, y muchos más. En la mayoría de las plataformas de este tipo tienes que hacer un pequeño pago de una suscripción anual para poder contactar a los anfitriones (en workaway por ejemplo es de alrededor de 50 dólares al año). 

Sin embargo, existen algunos otros lugares donde puedes incluso conseguir voluntariados gratis, como por ejemplo desde las cuentas de Instagram o Facebook. De hecho, en nuestro caso, el voluntariado del hostal en Cuenca, Ecuador lo conseguimos precisamente por el anuncio que vimos en una página de Facebook enfocada únicamente en publicar voluntariados. En ese momento estábamos viviendo ya en Ecuador así que simplemente hicimos una búsqueda rápida en las redes sociales de “Voluntariados en Ecuador” y salieron varios resultados y, entre ellos, apareció la publicación de ese hostal. 

Así que sí aún estás en duda de pagar la membresía anual de alguna plataforma, te recomendamos que al menos eches un vistazo. Revisa la información que se encuentra publicada, busca en las redes sociales voluntariados en algún país que te llame la atención, revisa los comentarios, evalúa tus opciones, pon todo en una balanza y toma una decisión. Y recuerda que hay muchos motivos para realizar un voluntariado, no necesariamente tiene que ser por la falta de dinero o por querer escapar desesperadamente de tu vida actual. 

También puede ser por el simple hecho de querer ayudar a una causa, de querer generar un impacto positivo en alguna región o comunidad, por querer marcar una diferencia en la vida de alguien, por el deseo de conocer gente nueva o por el simple hecho de querer salir de la rutina y vivir nuevas y enriquecedoras experiencias. De hecho, hay también muchos voluntariados enfocados en causas humanitarias, en la conservación del medio ambiente, en el cuidado y protección de animales en peligro, en la educación básica de adultos y niños, en apoyos a personas en situaciones vulnerables, etc.    

En mi caso particular el primer voluntariado que intenté hacer (el de Mongolia y China) sí fue por desesperación. No tenía nada de dinero y quería escapar de la esclavitud en la que me encontraba siendo Godinez de tiempo completo en un trabajo que odiaba. Pero el segundo voluntariado que sí se convirtió en realidad (el del hostal en Cuenca, Ecuador), fue desde una perspectiva muy diferente. Fue más por el tema de la curiosidad, por diversión, por el deseo de conocer gente nueva y por el hecho de querer vivir nuevas experiencias junto a mi pareja. Quizá en el futuro hagamos otro voluntariado enfocado más en ayudar en causas humanitarias. No me cierro a esa posibilidad. 

Así que bueno, sea cual sea tu caso, te puedo asegurar que el voluntariado es una experiencia que vale la pena considerar si tu intención es convertirte en un Nómada Digital y aún no estás seguro de cómo dar ese primer paso y más aún sí de momento cuentas con poco presupuesto (o nada de presupuesto). Así que ahora ya lo sabes, el dinero no es una excusa. Puedes comenzar hoy mismo aplicando esta estrategia. ¡Te deseo muchísimo éxito en tu próxima aventura!   

voluntariados para viajeros
volunteer group hands together showing unity

6 Responses

Deja un comentario